Sabat: “No estoy dispuesto a que me jodan la vida, como en el ’73”
Pedro Sabat, alcalde de Ñuñoa, mantuvo su dura postura contra las alumnas que lo criticaron por calificar la situación vivida durante la toma del Internado Femenino como un “puterío”. En medio de un ambiente tenso y mientras varios protestantes se encontraban en las afueras de Chilevisión, la autoridad comunal reiteró su posición en el programa “Tolerancia Cero”.
“Yo no me disculpo ni un minuto hacia las personas a las que me dirigí, yo me disculpo con las personas que son papás, mamás, profesoras y alumnas que no estuvieron en este tema y que no tuvieron derecho a estudiar por 7 meses, con un gobierno que toleró de la manera más grosera, pasara lo que pasara”, argumentó Sabat.
Agregó que “a mí me enseñaron que ciertas cosas no se deben aceptar y yo no las puedo tolerar. Y si estoy desquiciado o no, pastillas más o pastillas menos, lo que quiero decir es que hay cosas que no podemos seguir tolerando. Yo no estoy dispuesto a que me jodan la vida, como la jodieron el ’73, donde no tuvimos derecho a salir a los 17 años a una fiesta durante muchos años, porque hay desquiciados como son los que están gritando afuera del canal”.
“EL PEOR DAÑO A LOS NIÑOS FUE ENSEÑARLES SUS DERECHOS, PERO NO SUS DEBERES”
El alcalde de Ñuñoa se refirió a sus polémicas expresiones dadas a conocer la semana pasada. “Lo que quise decir es que había un despelote. Si yo en esa radio hubiese utilizado la palabra ‘desastre’ no estaría aquí y no estaríamos discutiendo el tema”, afirmó.
Con respecto a cómo espera enfrentar la situación cuando los niños vuelvan a clases, Sabat señaló que “las tomas ya están anunciadas para el 15 de marzo. Espero que mi gobierno, que la policía, que la fiscalía, que la justicia no siga liberando a los muchachos antes de subir al bus”.
“Tenemos libertad para tener sexo en el colegio, tenemos libertad para destruir a la educación, tenemos libertad para azotar a los profesores, a los directores humillarlos, pero no tenemos libertad para asumir nuestra responsabilidad. Creo que le hemos hecho a los niños el peor daño que le podemos hacer en la educación pública, que es enseñarle sus derechos y nunca sus deberes”, añadió. FUENTE. LA NACION.CL