Antonio Banderas exhibe sus secretos oscuros
La fotografía es una de sus grandes pasiones. Y hasta hace poco era algo que Antonio Banderas guardaba bajo cuatro llaves, en su mundo privado. Con la exposición “Secretos sobre negro”, el actor español devela esta faceta que se suma también a la de director, productor (de películas y perfumes) y cantante. A partir de hoy, la muestra, que antes rotó por Nueva York y Madrid, se exhibe en el Centro Cultural Borges, de Buenos Aires. Se trata de 23 tomas con las mujeres como protagonistas, en papeles que contienen referencias originalmente masculinas, como Don Juan Tenorio o El Barbero de Sevilla. Y muy embebidas en la cultura ibérica, tanto en estos casos como en los de Carmen o La Maja Desnuda.
Tres modelos: una brasileña, una colombiana y una española posaron en atmósferas sensuales, para estas imágenes (de un metro por 75 centímetros), que plantean una propuesta teatral.
Según Banderas, la fotografía está muy cerca de la poesía, porque “un instante congelado puede contar más que un libro o una película”.
Durante el paso de la muestra por Madrid, hace unas semanas, dijo que quiso “darle una vuelta y presentar (a la mujer) en los roles que habitualmente ejercen los hombres”. De ese modo, muestra a féminas “fuertes, casi agresivas, con cierto sentido irónico”.
La seducción, un arma que el artista de 50 años ha sabido explotar tanto dentro como fuera de la pantalla, a pesar de que asegura darle poca importancia en la vida real, también está presente en su exposición.
Como ésta va de la mano con el lanzamiento de su perfume “The Secret”, ese encanto también se refleja en la publicidad de su nueva fragancia, en que es deseado por diferentes mujeres, mientras camina por el pasillo de un hotel.
¿El secreto? Una simple botellita, con toques de madera y ámbar que, según el propio Antonio, “consiguen una interesante base oriental”.
FOTOS SOLIDARIAS
La muestra “Secretos sobre negro” está acompañada de una reflexión poética, que habla, entre otras cosas, de la muerte o, si se quiere, de lo fugaz que es la vida.
En principio, se suponía que por cada foto habría un comentario, pero, por lo visto, al actor se lo impidió el rodaje de “La piel que habito”, la nueva película que lo reúne nuevamente con Pedro Almodóvar, tras títulos emblemáticos como “Matador” (1986) y “Átame” (1990).
En Argentina, al igual que en cada país donde se presenta la serie fotográfica, se subastarán 7 fotos numeradas a beneficio de una ONG (acá, los fondos recaudados se destinarán al Hospital Español).
Esto significa que además de artista multifacético, Banderas tiene un costado solidario. ¿Será parte del secreto de su éxito?
CON ALMODÓVAR EN LA PIEL
Han pasado dos décadas desde que Antonio Banderas y Pedro Almodóvar se juntaron por última vez, para hacer “Átame” (1990). Filme de culto, en que el actor malagueño encarna a un chico obsesionado con una actriz porno (Victoria Abril) a la que rapta y mantiene “amarrada” en su departamento.
Cuatro películas anteriores sellarían para siempre esta relación: “Laberintos de pasiones” (1982), “Matador” (1986), “La ley del deseo” (1987) y “Mujeres al borde de un ataque de nervios” (1988). Esta última nominada a los Oscar como Mejor Película Extranjera.
Pero Banderas no sólo le debe a Almodóvar los cimientos de una carrera con que aterrizaría en Hollywood, en 1992, sino también su nombre artístico. Ya que fue el primero quien le propuso que optara por éste en lugar del “José Antonio Domínguez”, con que lo bautizaron sus padres.
Ahora, el protagonista de “El zorro” acaba de ponerse nuevamente a las órdenes de Almodóvar en “La piel que habito”, cinta con fecha de estreno para marzo de 2011.
Basada en la novela “Tarántula”, de de Thierry Jonquet, se trata, según el director, de “una historia durísima de venganza, con chicos y chicas y un personaje muy diabólico”. Este último es, precisamente, Banderas: un cirujano sin escrúpulos.
En la producción, “una película de terror, sin gritos ni sustos”, Banderas comparte pantalla con una musa reciente del realizador, Elena Anaya (“Hable con ella”, 2002), y otra histórica: Marisa Paredes (“Tacones lejanos”, 1991; “La flor de mi secreto”, 1995, o “Todo sobre mi madre”, 1999). Todo hace pensar que se trata de un gran reencuentro. Fuente. la nacion.cl