Insulza rechaza intervención en Venezuela: Eso quedó atrás hace tiempo
El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, se refirió a la situación de crisis que vive actualmente Venezuela destacando que “hace mucho que la época de las intervenciones quedó atrás” y que el problema que atraviesa ese país tiene como única solución el diálogo.
El secretario general de la OEA reiteró que la clave para alcanzar una salida pasa por el diálogo entre el Gobierno y la oposición. “Cualquier otra solución es inviable y sólo puede traer una agudización de la violencia que hoy se vive ahí. He insistido también que, para que ese diálogo sea fructífero, debe ser realista, debe hacerse cargo de todos los problemas y no sólo de los problemas que cada parte ve o quiere ver, y debe hacerse cargo de los niveles de violencia a que ha llegado la confrontación, y buscar reducirlos por la vía de compromisos de ambas partes”, indicó.
Insulza, sostuvo que en la crisis venezolana subyacen los problemas económicos que atraviesa Venezuela, “que son muy serios, así como los altos índices de delitos y otras situaciones que hoy afligen a los venezolanos, y que sólo van a encontrar solución por la vía de un diálogo efectivo y de compromisos realistas que comprometan a todas las partes”.
“No tengo dudas que la posibilidad de que ese diálogo se materialice está poniendo a prueba la madurez de la democracia venezolana”, añadió.
CRÍTICAS HACIA LA OEA
El secretario general de la OEA se refirió a las críticas que se han formulado a la OEA y a otros organismos subregionales como UNASUR, pero destacó que ninguna de estas instituciones ha caído en el error de pretender una intervención en Venezuela. “Hace mucho que la época de las intervenciones quedó atrás. Para ayudar a solucionar los problemas de un país, ningún otro país o agrupación de países debe intervenir en él. Deben ayudarlo a propiciar el diálogo e incluso, si son llamados a ello, pueden facilitarlo o servir de mediadores en ese diálogo. Pero en ningún caso intervenir en el sentido que ocurrió en tristes momentos de nuestro pasado reciente”, insistió, y recordó Guatemala en 1954, República Dominicana en 1966 y Chile en 1973 como casos de intervenciones que no pueden volver a ocurrir.
El líder de la institución hemisférica puso especial énfasis en expresar su rechazo a las prácticas de la intromisión indebida en los asuntos internos de otros estados, sobre todo cuando se trata de gobiernos que han sido elegidos legítimamente. “Un escenario completamente distinto es el que se da cuando en un país se destruye, o se amenaza destruir por la fuerza el sistema democrático”, afirmó, y recordó que la OEA cuenta desde el año 2001 con la Carta Democrática Interamericana.
“Por más críticas que reciba, la OEA no actuará –y no podría actuar - si nuestros Países Miembros no deciden poner en marcha los mecanismos de la Carta Democrática, algo que no han hecho de manera alguna en estas circunstancias”, añadió Insulza, quien recordó que el Consejo Permanente de la OEA se reunió para analizar la situación recientemente, aclarando que “no hubo una petición de aplicación de la Carta Democrática Interamericana”.
FUENTE. LA NACION .CL






























