Educación parvularia: tarea incompleta
Llegar con la educación preescolar hasta el último rincón del país es el nuevo desafío que el Presidente Sebastián Piñera le encargó al ministro de Educación Joaquín Lavín. La tarea no es facil, porque además del tema de la cobertura se necesita una importante revisión a la formación de los educadores que trabajarán en sala cunas y jardines. “Estudié parvularia porque los niños/as son el futuro y están abiertos a aprender todo lo que se les presenta vivir”, cuenta Fernanda Muñoz, educadora de párvulos recién titulada de la Universidad Finis Terrae, quien pese a estar totalmente comprometida con su carrera ya tiene una visión crítica sobre su futuro laboral:
“hay poca oferta de especialización para la educación parvularia. La mayoría está orientada a gestión, administración y convivencia escolar, pero no tanto a lo que es la etapa preescolar”, explica.
Miriam Iturriaga, directora de la carrera Educación de Párvulos en la universidad Andrés Bello (UNAB), coincide con esta opinión y es más drástica en su análisis: “La educación parvularia está absolutamente olvidada. Hay una sensación de que las educadoras no requieren más preparación”, asegura, y cree que esta situación se debe a que es una carrera poco valorada socialmente porque es vista como una “alternativa asistencial”, pero la realidad es que el rol de la educadora es fundamental en los primeros años de aprendizaje de los niños.
Aunque reconoce que la recién aprobada Ley General de Educación destaca la importancia de la educación temprana, Miriam Iturriaga cree que ahora que se subvencionará el pre-kinder es razón suficiente para darle mayor énfasis a la calidad de su preparación.
Victoria Peralta, directora del Instituto Internacional de Educación Infantil de la universidad Central (IIDEI), concuerda con la necesidad de fiscalizar el nivel de los profesionales, ya que “hay más oferta de la necesaria y no toda de la mejor calidad, que es lo que se le debe exigir a los docentes”, declara.
Con el programa Perfeccionamiento Docente para la Educación Parvularia, el Ministerio de Educación (Mineduc) dio las primeras señales de preocupación respecto al fortalecimiento de las prácticas pedagógicas de las educadoras. Para este año, según informa el Centro de Perfeccionamiento, Experimentación e Investigaciones Pedagógicas (CPEIP), se ofrecerán cursos de apropiación e implementación de los programas pedagógicos para primer y segundo nivel de transición, en modalidad b- learning (lectura), impartidos por universidades acreditadas.
“Es necesaria una formación académica superior y más profunda para tener profesionales que se dediquen también a la investigación; que sean capaces de dirigir proyectos y hacer docencia”, enfatiza Victoria Peralta, directora del IIDEI, y agrega “no basta con el título de educador para hacer clases en institutos ni menos en universidades, hay que especializarse”.
Miriam Iturriaga, directora de Educación de Párvulos de la UNAB, concuerda con Peralta y agrega que se necesitan programas “que fomenten la investigación al servicio de la labor del aula y permitan desarrollar técnicas y herramientas para resolver las problemáticas que allí surgen”.
Hernán Hochschild, coordinador ejecutivo de Elige Educar, hace un análisis más general respecto a las posibilidades de perfeccionamiento, y aunque reconoce que hay un déficit de programas específicos a nivel nacional, sobretodo en áreas de ciencias, educación diferencial y educación de párvulos, cree que “hoy están dadas las condiciones para formarse y especializarse en el extranjero”, una opción viable dada la cantidad de becas y convenios que ofrece el Mineduc. FUENTE.LA NACION.CL