Mario Cortés, juez de Casablanca: “El que quiera reclamar privilegios no sólo está fuera de la ley, es un desubicado”
CASABLANCA.- Mario Cortés, juez de Casablanca, es el “terror” de quienes gustan de la velocidad excesiva y transitan habitualmente por la ruta entre Santiago y Valparaíso. Ayer sumó nuevas “víctimas” entre los políticos, incluido el propio Secretario General de la Presidencia, José Antonio Viera-Gallo, durante una fiscalización que él presenció desde el borde de la ruta.
—Lo acusaron de montar un show mediático, con la presencia de la prensa en el operativo.
—¿Cómo va a ser un show mediático, si la que estaba en la ruta era prensa de Santiago, yo vivo en Viña y mi juzgado está en Casablanca? No tengo ninguna relación con la prensa de Santiago. Ellos tendrán que decir quién les avisó de la diligencia.
Y aclara: “Yo no andaba pasando partes, como se dijo. Esa es una función de Carabineros, y yo estaba a más de 100 metros verificando en terreno si efectivamente circulaban vehículos con baliza y a exceso de velocidad. El único parte que se me consultó, por radio, fue el caso del señor ministro. Y dispuse que se cursara, porque las explicaciones o los descargos se hacen en el juzgado, no en la carretera”.
—El ministro dijo que no llevaba prendida la baliza.
—Si es así, el chofer tendrá la oportunidad de dar las explicaciones y probarlo. No hay nada resuelto, todavía. Lo que ocurre es que hay reacciones viscerales de algunas personas, que convierten esto que es normal en algo especial. Estas reacciones indebidas de algunas autoridades pueden ser porque sienten que se les está violentando algún privilegio.
—¿Qué privilegios?
—El que quiera reclamar privilegios no sólo está fuera de la ley, sino que es un desubicado. En general, eso las autoridades no lo hacen. Todos los días, circulan entre Santiago y Valparaíso 150 a 200 autoridades, y la inmensa mayoría acata las normas. Sólo unos pocos, muy ocasionales, tienen reacciones malas. Y son las que quedan instaladas en la opinión pública y le causan un flaco favor al Parlamento.
—Con esto sigue cimentando su fama de duro.
—No debiera ser noticia que un juez aplique la ley por parejo a todos. Yo recibo y escucho a todos, no permito que se haga justicia desde el mesón. Bajo multas, dejo sin efecto partes poco criteriosos. Hasta tengo graduados los partes, porque no es lo mismo ir a 126 km/h que a 177 km/h.
—¿Es partidario de aumentar la velocidad?
—Creo que hay tramos que lo permiten, como entre la salida del túnel Zapata y Casablanca, que son casi 10 kilómetros de ruta recta y sin obstrucciones. Ahí podría subir, por ley, a 130 ó 135 km/h. ¡Pero ahí se señaliza y corremos todos! No pretendamos que el juzgado haga vista gorda y deje correr sólo a los parlamentarios. Eso no sólo es inmoral y antiético, sino ilegal.
FUENTE. LA SEGUNDA . COM






























