Controversia por ataque a Libia marca gira de Obama por A. Latina
El anuncio formulado en el primer día de su gira latinoamericana por el presidente estadounidense, Barack Obama, del inicio de las acciones militares estadounidenses en Libia, divide a los presidentes latinoamericanos, en tanto el gobierno de Brasil optó por un prudente silencio.Obama realizó su anuncio en la capital de Brasil, país que se abstuvo el jueves en la votación en el Consejo de Seguridad de la ONU de la resolución en la que se apoyó la intervención militar de la coalición, después de haberse reunido con la presidenta brasileña Dilma Rousseff.
Los presidentes de Colombia, Perú y Panamá y el gobierno de Chile expresaron su apoyo.
Los presidentes de Venezuela, Bolivia, Paraguay y Nicaragua condenaron el ataque, así como el gobierno de Ecuador.
Este domingo, el asesor de Obama para las Américas, Daniel Restrepo, dijo a la prensa que Obama y Rousseff habían conversado sobre la situación en Libia, pero que la presidente brasileña no había expresado ningún “malestar” con respecto a las operaciones militares.
“Ninguna inquietud fue expresada por parte de nadie en la habitación sobre las diferencias que pudieron haberse manifestado durante la votación en el Consejo de Seguridad”, insitió el consejero presidencial estadounidense.
Una fuente de la Presidencia brasileña dijo este domingo a la AFP que “los dos presidentes dialogaron sobre el tema y cada uno se limitó a explicar la posición de su respectivo gobierno”.
En tanto, un diplomático brasileño que pidió el anonimato dijo a la AFP que “el diálogo se centró en explicar lo que cada gobierno pensaba. No se trató de justificar cada voto en el Consejo ni de decirle al otro lo que debía hacer”.
La decisión de Obama de anunciar acciones en Libia estando en un país que se había abstenido de votar en la ONU no pasó desapercibida por la prensa local. “Desde Brasilia, Obama desata guerra contra Gadafi”, tituló el diario Correio Braziliense.
Los primeros en pronunciarse, el mismo sábado, fueron los presidentes de Venezuela Hugo Chávez, para condenar el ataque, y Juan Manuel Santos, de Colombia, cuyo país votó a favor de la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, para reiterar su apoyo.
Chávez volvió a condenar enérgicamente este domingo las operaciones y envió un alerta: “Ni se les ocurra” intentar apoderarse del petróleo venezolano.
“El imperio yanki tomó la decisión de derrocar (a Gadafi), de aprovechar la insurgencia popular para derrocarlo, e incluso matarlo, y sobre un mar de sangre adueñarse del petróleo. Ni se les ocurra venir aquí por el petróleo venezolano”, dijo el mandatario.
Venezuela es el principal proveedor latinoamericano de petróleo a Estados Unidos e integra la OPEP junto a Libia.
Santos reiteró su apoyo a la resolución del Consejo de Seguridad en ocasión del inicio de las operaciones y dijo que se sentía orgulloso de que su país esté del lado de “posiciones que defiendan la libertad, la democracia y los derechos humanos”.
Chile, adónde llegará Obama el lunes, afirmó este domingo que “comparte y apoya la resolución (de la ONU) y expresa su esperanza que las medidas establecidas en la resolución permitan el pronto restablecimiento de la paz, ponga término a la violencia, resguarde la integridad de la población civil y se establezca el pleno respeto de los derechos humanos” en Libia, indicó una nota de la cancillería chilena.
El presidente de Perú, Alan García, saludó “la acción del gobierno de Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña para hacer frente a la masacre perpetrada por la dictadura del régimen libio”.
Los presidentes nicaragüense Daniel Ortega y boliviano Evo Morales adhirieron a la tesis venezolana de que se trata de una tentativa de las potencias de apoderarse del petróleo libio.
El presidente paraguayo, Fernando Lugo, condenó la operación de la coalición y dijo que “ningún tipo de violencia es justificada”.
En Quito, la cancillería ecuatoriana emitió una nota oficial que clasificó como “inadmisible” el inicio de operaciones militares contra Libia.
El presidente panameño Ricardo Martinelli dijo que “es lamentable que exista una invasión (a Libia), pero es mucho peor que un presidente masacre a su pueblo”.
“Igual pasó en Panama que tuvimos una dictadura militar impuesta a punta de bala de muerte, dolor y sacrificio (…) y tuvo que venir una invasión americana”, dijo Martinelli en alusión al cruento ataque estadounidense que puso fin a la dictadura de Manuel Antonio Noriega. FUENTE. LA NACION.CL