Vaticano elabora un “eficaz y coordinado” plan antipedofilia
Venidos del mundo entero, 150 cardenales, príncipes de la Iglesia Católica, se reunieron con el Papa Benedicto XVI para tratar un tema nada de santo, pero sí muy real en el seno de la Iglesia: la pedofilia. En el consistorio de este fin de semana, el Pontífice también nombrará 24 nuevos purpurados. Aunque algunos de ellos, como el cardenal mexicano Javier Lozano Barragán, se mostraron “cansados” ya del escándalo provocado por los numerosos casos de abusos sexuales cometidos durante décadas por sacerdotes contra menores de edad, otros ven en este tema una crisis en ciernes para la Iglesia Católica que debe ser abordado. Por esto los purpurados -en su “jornada de reflexión y oración”- fueron informados sobre el programa “eficaz y coordinado” que la Santa Sede prepara para combatir ese grave fenómeno. También acordaron preparar “una carta circular para las Conferencias Episcopales con las líneas a seguir para un programa coordinado y eficaz” contra la pedofilia y se reitera la necesidad de denunciar estos casos a las autoridades civiles, como anunció el cardenal estadounidense William Levada, prefecto para la Doctrina de la Fe (ex Santo Oficio) y encargado de investigar tales crímenes, según un comunicado del Vaticano. Levada informó a los otros miembros del Colegio Cardenalicio de la puesta al día del Código de Derecho Canónico sobre el delito de abusos sexuales contra menores, y reiteró la necesidad de una “mayor tutela” de los obispos hacia sus fieles. Además, insistió en la necesidad de “escuchar y acoger” a las víctimas y de colaborar con las autoridades civiles, así como de “un mayor compromiso de protección a los niños y jóvenes”, destacó el Vaticano en un comunicado. Se trató de la primera reunión a un nivel tan alto que se celebra en el Vaticano después de que estalló, a finales del año pasado, un escándalo en Irlanda por la divulgación de dos informes oficiales sobre los abusos sexuales a cientos de menores, cometidos por religiosos de ese país y encubiertos por las autoridades eclesiásticas durante décadas. La ola de escándalos por los abusos a menores se extendió a Alemania, Austria, Italia, Holanda, Bélgica, además de Estados Unidos y varios países de América Latina. PESIMISMO La iniciativa del Papa para hablar de un tema que aún divide a la jerarquía católica, no despertó tampoco ningún entusiasmo de parte de las víctimas de los abusos y sus familias, que pidieron menos “charla” y más acciones concretas. “No guardamos esperanzas sobre una reunión de los mismos hombres de la Iglesia que y siguen ignorando y escondiendo un crimen tan horrible contra niños”, decía un comunicado la asociación de víctimas estadounidense SNAP. “Esperamos que la jerarquía católica logre enfrentar ese desafío” y “tome medidas de verdad” como entregar a la justicia a todos los curas culpables, pidieron. LN /AGENCIAS / INFORMA . lanuevaopcion.cl